Durante los meses de verano las reuniones con familiares y amigos se hacen más frecuentes. Las barbacoas se convierten en el plan estrella. Estar al aire libre y degustar una deliciosa ración de carne a la brasa. Si sabes hacerlo, arrasarás.
Por eso, a continuación te proponemos algunos consejos para convertirte en el rey de la parrilla. ¡Presta atención!
Conviértete en el rey de la parrilla en 7 pasos
¿Cuántos invitados?
Conocer el número de invitados con la suficiente antelación te ayudará a planificar las raciones. Debes tener en cuenta que cada persona suele consumir una media de 400 gramos de carne. Haz que tus comensales queden satisfechos combinando diferentes tipos de carne. Así proporcionarás una mayor riqueza a tu menú.
Mira más allá de la carne
La carne ocupará un papel importante, pero, recuerda. Tus invitados querrán comer más cosas. Asegúrate de incluir alguna alternativa vegetariana para aquellos que no consuman carnes de forma habitual. Enriquece tu menú con unos buenos entrantes, unas bebidas refrescantes, ¡y no te olvides de escoger un postre apetitoso!
Presta atención a las brasas
El secreto está en las brasas. Si sabes llevarlas al punto perfecto, los resultados serán rompedores. Ten en cuenta que estarán listas cuando adquieran una tonalidad gris. Además, una vez que las hayas preparado, deberás asegurarte de que la parrilla se halla a una distancia prudencial de las brasas. De lo contrario la carne se quemará y en cambio quedará poco hecha o cruda en su interior. Para asegurarte de su buen estado, será necesario que te armes de paciencia y pases la mayor parte del tiempo junto a la barbacoa.
Pon toda la carne en el asador
Para sacarle todo el partido a la carne lo más recomendable es prepararla en el asador manteniéndola a temperatura ambiente al menos durante 45 minutos antes de introducirlas en la barbacoa. Puedes aprovechar y agregarle alguna especia para intensificar su sabor.
Ten en cuenta esto para asar la carne
El proceso de asado requiere de dedicación y tiempo así que lo más recomendable es hacerlo con tranquilidad al tiempo que mantienes una conversación agradable con algún ayudante. Deja la parrilla sobre las brasas y espera pacientemente a que se hagan poco a poco. Ten en cuenta que no es necesario que le des la vuelta hasta que hayan alcanzado su punto.
Sazonado y especias
Muchas veces recurrimos al sazonado antes de asar la carne. Sin embargo, en barbacoas donde hay varios invitados lo más recomendable es que se haga después de haberla pasado por las brasas. De este modo cada comensal podrá agregarle la cantidad de sal que se adapte a sus preferencias.
Fin de la barbacoa
Muchos incendios o accidentes se producen por falta de atención. Cuando nuestra barbacoa termina muchas veces tendemos a dejar las brasas encendidas y esto no es recomendable. Asegúrate de que se han apagado. Para ello puedes bloquear el acceso de aire a su interior sirviéndote de una tapa si la tiene. Además, si mantiene el calor tienes una oportunidad perfecta para darle un repaso con un estropajo de metal y dejarla a punto.